Uno de los procedimientos más solicitados en el campo de la cirugía plástica, tanto por hombres como por mujeres. Se trata de una cirugía que brinda una nueva forma a la nariz, ya sea para:
- Aumentar o reducir su tamaño.
- Cambiar la forma de la punta o del puente.
- Agudizar la abertura de los orificios nasales.
- Cambiar el ángulo entre la nariz y el labio superior.Sus justificaciones pueden:
- Ser de carácter estético.
- Obedecer a una causa reconstructiva como en el caso de un accidente.
- Tener razones funcionales, por ejemplo que la forma de la nariz obstruya el normal funcionamiento del sistema respiratorio.En este caso, reemplazamos el bisturí con el láser porque realiza cortes más precisos y cauteriza los vasos sanguíneos adyacentes, con lo que prácticamente no hay sangrado. Ya no colocamos tapones al final de la cirugía, se produce la mitad de inflamación y amoretamiento, y la recuperación es más corta.